En el verano de 1972 se celebró la final del Campeonato Mundial de Ajedrez en Reikiavik donde se produjo el enfrentamiento definitivo: el estadounidense Bobby Fischer desafió al vigente campeón del mundo, el soviético Boris Spassky, con el objetivo de poner fin a 24 años de dominio de los jugadores soviéticos en el Campeonato del Mundo.
Asume los papeles de Spassky y Fischer y da vida a este momento histórico. A medida que juegues cartas únicas de tu mazo asimétrico, se simularán múltiples partidas de ajedrez cortas y tensas. El primero que consiga 6 puntos (cada victoria y cada empate valen 1 punto) ganará el título y se convertirá en una leyenda del ajedrez.